Huesca, ciudad de rica herencia cultural, ofrece un panorama escénico diverso que se manifiesta en varios espacios significativos. El Teatro Olimpia se erige como el principal referente, un emblema inaugurado en 1925 cuya imponente fachada clásica ha sido testigo de casi un siglo de actividad cultural, desde zarzuelas y cine hasta su actual programación variada de teatro, música y danza, siendo además sede del Festival de Cine. Otro espacio con profundo arraigo es el Teatro Salesiano, fundamentalmente conocido por acoger la tradicional y multitudinaria representación de "La Pasión de Huesca". La modernidad y las propuestas contemporáneas encuentran su lugar en el Centro Cultural Manuel Benito Moliner, antiguo matadero que hoy es un espacio polivalente vital durante la Feria Internacional de Teatro y Danza. Complementando esta oferta, el Palacio de Congresos de Huesca, con su amplio auditorio, también programa espectáculos teatrales y de gran formato. Juntos, estos recintos tejen la vibrante vida escénica de la ciudad, asegurando que las artes sigan floreciendo en Huesca.